Hay placeres en la vida que por suerte, no valen dinero. La música es uno de ellos. Y si existe un grupo que me ha hecho disfrutar estos últimos 11 años ha sido CRIM. Hacía tiempo que esperaba recibir su cuarto LP y por fin ya ha llegado. Cançons de Mort es un pedazo de disco de principio a fin, que sigue la línea del mejor punk rock criminesco. Y es que estos tíos han logrado crear una marca, sólo tienes que escuchar la primera nota para saber de qué grupo se trata. No hay engaños. Son ellos. Canciones redondas, intensas, luminosas, vitales, con energía y contundencia, letras afiladas y a veces venenosas, metralla lírica, con melodías que silban como balas, para corearlas a pleno pulmón y que te cautivarán porque van directos al tuétano. Fuerza centrífuga sin medida ni límites. El bloque de Sense tu estic molt bé, La veritat és perillosa y Estiu de merda te pondrá la piel de gallina y los pezones erectos. Placer adulto. Sí, placer que no cuesta dinero, pero yo te recomiendo que no seas rata y te gastes cuatro euros en este LP. Tu colección de discos lo agradecerá. Lo agradecerá mucho, porque ellos han vuelto a hacerlo. Y es que no puedo parar de escucharlo. Orgullo de comarcas.