Este libro de Marika Vila Migueloa representa una contribución importantísima al conocimiento y análisis del cómic español y, más concretamente, de las voces de las autoras en este. Hasta hace poco, el cómic era un mundo casi exclusivamente masculino; solo hacía falta leer los nombres en las cubiertas o pasearse por una librería especializada para darse cuenta de que tanto autores como lectores, en su gran mayoría, eran hombres. ( ) Marika Vila realiza una necesaria labor de visibilización del aporte de las autoras al cómic español, desde las pioneras hasta las jóvenes contemporáneas. Asimismo, efectúa una crítica lúcida de la aparente ruptura en esta representación de las mujeres y de sus cuerpos que significó el cómic de los años setenta y ochenta, el cual, en realidad, perpetuó una mirada cosificadora y reductora hacia esos cuerpos y, por lo tanto, hacia las mujeres en general.
