Gil Scott-Heron tenía apenas veintiún años cuando firmó un contrato discográfico con el legendario Impulse! el sello Flying Dutchman del productor Bob Thiele. Thiele había conseguido el libro de poemas de Scott-Heron titulado Small Talk At 125th And Lenox y quería grabar un álbum de palabras habladas con un presupuesto mínimo.
El éxito masivo de ese álbum condujo a dos álbumes más en Flying Dutchman que incluirían músicos de estudio de clase mundial como Bernard Purdie, Ron Carter, Hubert Laws, junto con Brian Jackson, socio de Scott-Heron desde hace mucho tiempo. The Revolution Will Not Be Televised recopila las mejores pistas del primer período Flying Dutchman de Scott-Heron